8 oct 2011

EL NIÑO DE 3 AÑOS Y LOS TEXTOS

Es curioso y emocionante ver cómo los pequeños van aprendiendo a leer y escribir. Tendemos a pensar que los niños de 2 y 3 años, a los que no se les ha estimulado específicamente, son incapaces de hacerlo. Y tal vez sea cierto, pero el sistema de lectoescritura es mucho más complejo que el hecho de escribir o decodificar el lenguaje.
Cuando hablamos del texto no hablamos sólo de palabras y decodificación, hablamos también de comunicación, comprensión y expresión coherente y con significado.
Es por este motivo que debemos hacer una adecuada evaluación de los conocimientos previos de los niños, en relación a los textos y la escritura. 
Cuando simplemente  nos dedicamos a que el niño copie una y otra vez su nombre, hasta que lo aprenda de memoria, muchas veces le estamos impidiendo que descubra por sí mismo las características propias de su nombre: el tipo de letras que contiene, en qué se parecen o diferencias con otras, si es largo o corto... Y es que los niños llevan consigo un bagaje previo que les ha hecho formularse alguna hipótesis sobre el sistema lectoescritor. En su entorno hay muchos textos: etiquetas, libros, revistas, cuentos, notas...
Estos primeros días de cole, en las clases de tres años, tenemos la oportunidad de apreciar esas primeras hipótesis que el niño se forma sobre la escritura.
Pero para ello tenemos que brindarle la oportunidad de decirle: " Escribe..."
Debemos tener siempre una buenas expectativas sobre los niños  ¡y nos sorprenderán!
Estos dos textos (su nombre propio) son de niños que, con apenas 3 añitos, han comenzado su escolaridad.
En este caso les he dicho que escriban su nombre, sin modelo delante; aún no lo tienen.
Como podéis observar, son dos maneras bien diferentes de trazar su nombre, pero en los dos podemos ver que hay una intención diferente a la de un dibujo, aunque se encuentren aún en la etapa de garabato.
Violeta concibe un texto (su nombre) como algo continuo. Moad, pese a la diferencia de idioma, ya comienza a trazar pseudoletras. ¡Increíble!, ¿no?
Pero si la única oportunidad que les damos es la de copiar... estas hipótesis sobre los textos se desvanecen.


2 comentarios:

  1. Es emocinante, sorprendente y muy valioso. Y sobre todo lo más importante para mí es darle la oportunidad de que escriban, como ellos pueden, como ellos piensan que es y valorarlo para poder avanzar de "a poquito".
    Un abrazo desde Aula de infantil.

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  2. Hola Carmen:
    Pues sí hay que saber ver, observar, escuchar y dejarnos empapar.
    Por eso me encanta tu blog lleno de experiencias interesantes. Pero últimamente me da problemas. Debes tener un malware alojado.
    un abrazo

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